viernes, 6 de noviembre de 2009

Requiebro

Por el chat pedían la primera comparsa de Martínez Ares y aquí está. Año 1984, con el grupo de Nuestra Andalucía, dirigido por Jesús Monzón. Martínez Ares salía en la comparsa como guitarra, y Angel Zubiela también estaba en el grupo.

En sus memorias en Diario de Cádiz: A una señal de Jesús Monzón nos metimos en la secretaría de la peña, donde me invitaron a cantar ese pasodoble que yo guardaba con tanto esmero. Me senté en una silla y cuando quise darme cuenta estaba cantando rodeado de toda la comparsa que tanto había pregonado las coplas de Pedro Romero. Cuando acabé de cantar el primer pasodoble, que era un piropo a Cádiz, se me salía el corazón por la boca. Hubo un silencio y de pronto alguien dijo: "¿Puedes cantarlo otra vez?". Yo, para mis adentros me decía: "¡Esta no puede ser mala señal!".



Presentación



No se como soñar, sin tí no se vivir,
solo pido en silencio
que nunca el tormento te aleje de mí.
Sabes que eres mi mar,
eres mi perdición,
eres como un duelo entre sueño y pasión.

No te puedo dejar, yo me muero sin tí,
si me falta tu aliento, tu risa, tus besos,
ya no soy felíz.
A nadie importará, si sufro por tu amor,
tú eres parte de un tiempo
que lleva en su cuerpo toda mi ilusión.
No te quiero soñar, tu eres parte de mí,
te llevo tan dentro que si ahora te pierdo
no sabría vivir.

Te quiero, que vengo a decirte te quiero,
llevarte conmigo de nuevo,
y sentirte en mi corazón.
Te quiero, que vengo a decirte te quiero,
llevarte conmigo de nuevo,
y sentirte en mi corazón.


Como un pobre errante



Como un pobre errante me has de encontrar
buscando un triste y bello final,
que dulce muerte
sería una sola mirada tuya.

Eres una rosa en la bajamar,
que va mostrando su hermoso ajuar,
resulta bello verte soñar
sobre un mar de espumas.

Tienes ese duende de la ilusión,
tú eres el sello de este rincón,
linda paisana tu eres la esencia de algún piropo.

Con esa carita de compasión,
como embrujaste mi corazón,
que ya no puedo irme de tu vera
porque los celos me vuelven loco.

Ay amor de mis amores,
los piropos a tí te sobran,
para qué quieres más honores,
si eres mi dueña y señora.

Linda gaditana por tu amor,
sueño, siento y vivo con pasión,
tú eres mi única alegría.

No quiero pensar en un adiós,
prefiero verte en mi interior
como la reina de mi agonía.

Ay niña dime tú lo que pasó,
para que con tu luz ciego esté el corazón.
Ay niña por favor, no mates la ilusión,
de mi nueva mañana.
Eres la bendición para un pobre de amor,
ay, linda gaditana.


Con todo mi afecto



Con todo mi afecto y admiración,
desde la tierra de la ilusión,
quiero mandarte amigo Felipe un puñao de letras.
Letras que nacieron en tu rincón
y que no aclaman tu condición,
porque en el fondo mi tierra sufre como cualquiera.

No creo que debiste así profanar,
con malas letras este lugar,
porque en el fondo no eres siquiera gaditano.
Eres como tú bien dijiste al final,
cuando por fin salió la verdad
un Mallorquín de pies a cabeza
que tiene el ancla aquí echao.

Pero no quiero aburrirte, contándote tus problemas,
tú sabrás bien lo que hiciste,
arréglate como puedas.
Pero has de saber que en mi ciudad
nadie fue preciso ni será,
ni con piano ni poemas.

La Caleta llora tu verdad
y aquellas notas volverán
a estar presente en otra tierra.
De nada servirán tus obras de postín,
tú aquí no tienes ná, tu eres Mallorquín.
Tan solo escúchame, si decides volver,
piénsalo bien hermano.
Sabrás que en mi Ciudad no existe lo neutral,
o moro o cristiano.


Con un cierto embrujo

Con un cierto embrujo de cielo y mar,
bello contraste de un despertar,
dice que el sol cuando nace en Cai se vuelve loco.
No es porque cansado se encuentre ya
de ser el dueño del litoral,
es que mi tierra lo va embriagando poquito a poco.

Sé que existe algo entre el sol y yo,
que aquí nos ata el corazón,
somos hermanos que compartimos mil sueños rotos.
Él te va alumbrando con su pasión
y yo en penumbra te voy cantando,
Tacita mia, bellos piropos.

Yo no vivo en las alturas,
por mi Cai vivo y muero.
No creas que son frases de un bufón
que se disfraza pa la ocasión,
yo sin mi tierra me moriria.
Eres una bendita ilusión
que me ha engañao el corazón
pa que te quiera más todavía.

Qué importa este disfráz
que te represento
como un bello rosal,
en tiempo de esplendor.
Tú tienes que saber,
que siempre llevaré mi tierra en mis adentros.
No quiero que al final te tenga que
como un triste requiebro.


Cuplés



Con aquella lesión del famoso Maradona,
se formó en España entera tanto jaleo,
que a pesar de que Diego dice que lo perdona,
Goiko sigue más perseguido que Ruíz Mateos.

En el Cádiz, Jorge González, salvadoreño,
al que llaman el Mágico por sus filigranas,
es famoso también por su enfermedad del sueño,
y en vez de chandal, usa pijama.
Y si Mágico fuera un cantaor flamenco
le tendrían que decir, el niño de la almohada.

Gaditana, por morena, bonita y gentil,
ay, paisana tú me vuelves loco,
por eso este piropo, te lo dedicamos a tí.
Y al compás de un tanguillo juncal
mi requiebro se hace canción,
pisa con garbo mi capa,
¡viva la mare que te parió!.


Al señor Fraga, don Manuel,
se le fue la boca
cuando en la prensa comparó
con muy poca gracia,
al partido del comunismo con chirigota
sin respeto no se concibe la democracia.

Para que sepa ese señor tan repuñetero,
lo que es una chirigota vamos a informarle,
es un grupo de amigos
con arte y con salero,
y uno de ellos es postulante.
Pero tiene más dignidad que el politiquero
que siempre hizo el gachó mangar de la olla grande.

Gaditana, por morena, bonita y gentil,
ay, paisana tú me vuelves loco,
por eso este piropo, te lo dedicamos a tí.
Y al compás de un tanguillo juncal
mi requiebro se hace canción,
pisa con garbo mi capa,
¡viva la mare que te parió!.



Popurrí

1 comentarios:

francisco dijo...

Aunque sea tras muchiiissssiimos años hoy he conseguido encontrar quien la cantaba No es otro que nuestro gran DOON ANNTOONIO