viernes, 9 de enero de 2009

Los Arapahoe que joe

Tengo más o menos claros mis primeros "recuerdos carnavaleros". Podría decir que son tres, el ver una y otra vez en una cinta que me grabaron a Una chirigota con clase, y el cuarteto de Rota: Windous 95. Me podía pegar las horas y las horas. Y el otro, es ver a ésta chirigota cantar en mi pueblo (¡qué pena que no supiera apreciar que también estaban cantando esa noche Los Piratas!).

Chirigota del Yuyu, del año 1998: Los Arapahoe que joe, que consiguieron el segundo premio, por detrás de los Juancojones.



Los jóvenes de hoy en día



Los jóvenes de hoy en día,
jugar a cosas extrañas.
Porque como juega un indio,
no juega nadie en España.

Debe ser que yo ya voy pa viejo..
y me sorprendo de tó, vaya por Dios.

Yo jugar de chiquitito,
a las tres en raya al atardecer.
Y los niños de hoy en día se meten las rayas
al anochecer, ¡de tres en tres!.

Cuando yo jugaba en el recreo
se formaba un cachondeo con la oca y el parchís.
Y ahora en el colegio el estudiante
dice que lo pasa en grande con la coca y el jachís.

Yo jugar al esconder y también al abejorro,
y hoy juegan todos los niños
a ver quién fuma más porros..

Yo daba muchos saltos
cuando jugaba al mancuiqui,
y ahora saltan como locos
en cuanto se comen un tripi.

Aquí se juega a los tapones,
de una manera especial,
arrancan el tapón dos niñas en minifaldas,
y beben como locas hasta que caen de espaldas.
Y ya de madrugá, se montan en sus motos
y cogen unos piques, dale más, dale más,
pero cuando ven a los guardas
se vuelven normales y juegan al escondite.


Pa dentro de un par de años



Pa dentro de un par de años,
decir la Unión Europea,
que la peseta no vale,
y hay que cambiar la moneda.

Cambian la peseta por el euro,
y eso va a ser un descontrol, lo digo yo.

Se verán a las señoras,
con calculadoras en el almacén.
El aceite a doce euros,
lo cambio a peseta y tiene que ser:
ay, ¡Pepe ven!.

Hasta cambiará el vocabulario,
que decimos a diario, ya lo comprobarás tú.
Cuando se te acerque un chavalito,
y te pida dos euritos pa coger el autobús.

Afectará al Carnaval y tendremos que aprendernos,
no ya los duros antiguos
si no los euros modernos.

Van a volvernos loco,
los europarlamentarios.
Pero más loca va a volverse,
la vieja que vende el diario.

Tendremos que pagarle en euro,
y se descontrolará.
Y algunos la pondrán como los mismos trapos,
cuando nos de la vuelta que a ella le salga del pavo.
Nos quieren engañar los eurodiputados,
con esas tonterías, anda ya, anda ya,
porque aunque me paguen en euros,
seguiré cobrando la misma tontería.

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